La isla de Rodas es de las más alejadas de la Grecia continental, sin embargo fue mi punto de entrada a este maravilloso país. Llegaba a visitar Rodas con una expectativa enorme y ¡no me decepcionó! 😃
Rodas es una de las ciudades medievales más grandes y mejores conservadas de Europa, dentro de las murallas no pueden ingresar autos, lo que le da un encanto extra. Fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco en 1998
Conenido
Llegada a Rodas
Mi entrada a Grecia fue por mar, a la isla de Rodas. Salí en ferry desde Marmaris, Turquía. A pesar de mis facilidad para marearme en barcos, hice un esfuerzo para salir a la parte abierta cuando nos acercábamos a la isla. El azul del mar mediterráneo contrastando con las murallas de una ciudad medieval es una imagen que me negaba a perderme. Como amante de los castillos y murallas medievales, visitar Rodas era uno de los destinos más esperados de mi viaje.

Por suerte mi estómago y yo resistimos hasta pisar tierra firme.
En el puerto, luego de hacer los trámites de migraciones, no encontré mucha información turística, sólo algunos taxis que esperaban por los pocos pasajeros que no eran de excursión. La mayoría de pasajeros eran turistas (sobre todo rusos) veraneando en las costas turcas que contratan tours para visitar Rodas por el día.
Será que los taxis no son para mi, porque fue una de las pocas veces que había optado por este modo de transporte (mi alojamiento quedaba a casi 2 km) pero el chofer me dijo que no, que no me llevaba. Luego de algún intento de diálogo en una mezcla de inglés/griego/español lo único que entendí era que el taxi no podía entrar al centro histórico… lo cual sonaba razonable, salvo porque mi alojamiento no era dentro del centro histórico, así que no supe si no me entendía o no le servía el viaje… lo concreto es que no me quedó otra que caminar.
Por suerte para esta altura del viaje andaba ya con mi carry on en vez de la mochila, y sumado a que estaba hipnotizada con el paisaje, el trayecto bordeando la muralla fue muy disfrutable.

Mi alojamiento resultó ser un lugar divino, con un balcón y una terraza con vistas al mar a lo lejos. Allí, el dueño me recibió con ganas de charlar, y pronto estábamos compartiendo historias sobre Grecia y Uruguay, ¡incluso comparando a los 33 orientales con los 300 espartanos de Leónidas! (Salvando algunas distancias, claro 😉).
Visitar Rodas es perderse
Luego de almorzar en uno de los tantos barcitos de mi nuevo barrio, emprendí camino hacia el centro histórico. Por suerte me perdí, lo que provocó que terminara entrando a la ciudad amurallada por una puerta poco transitada y casi sin turistas.
Caminar por esas callecitas, en esta zona con poca gente es como un viaje en el tiempo. De pronto aparecía alguna moto o bici y volvía al siglo XXI, pero me encantaba volver a perderme sin mucho rumbo en esa ciudad medieval, sin saber si iba a aparecer un motociclista o un caballero galopando con armadura y espada en mano.




También están las calles con tiendas de souvenirs, con restaurantes, con ofertas de todo tipo. ¡Que no por eso son menos atractivas!
Si hay crucero en la ciudad se nota que la zona está más llena de gente y en algunos momentos hasta se hace pesado caminar por las calles principales dentro de las murallas. Pero la ciudad amurallada es bastante grande, por lo que si uno se agota de ver mucha gente, es fácil apartarse un poco por cualquier callecita. De hecho recomiendo perderse. Aunque es una recomendación poco útil porque es imposible no hacerlo. ¡Por suerte!
Imprescindibles al visitar Rodas
Algunos de los puntos más importante dentro de la ciudad amurallada:
Museo Arqueológico de Rodas. En el edificio del viejo Hospital de los Caballeros. Tiene objetos de excavaciones de la isla y de otras cercanas
El Palacio del Gran Maestre de los Caballeros de Rodas. Un castillo impresionante que además alberga un museo sobre la historia de la isla.
La Calle de los Caballeros. La calle principal en la antiguedad, donde los caballeros tenían sus posadas de cada país o región y hoy se mantienen algunas de ellas.
La Torre del Reloj. Se puede subir y apreciar hermosas vistas
Pero podrás encontrar iglesias, museos, galerías, posadas, tabernas, hasta una mezquita, caminar dentro de las murallas es encantarse a cada paso.


Acrópolis y Estadio Griego
Fuera de las murallas de la ciudad, se puede encontrar una acrópolis y un antiguo estadio griego. Cuando lo visité estaba en restauración, por lo que prácticamente sólo vi un montón de andamios, de todas formas no me pareció que hubiera demasiado debajo de ellos. Del estadio quedan las gradas, la pista es parte de un gran parque que mucha gente lo usa para correr o descansar en la zona. Igual me pareció un poco descuidado.


Si tienes pensado visitar Atenas, las ruinas de Rodas no te impresionarán tanto, pero es un buen paseo si tienes tiempo.
Y de paso por esta zona también se encuentran estas vistas:

¿Y el coloso de Rodas?
Fue una de las maravillas del mundo antiguo, una estatua enorme para su época (290 AC). Pero lamentablemente no queda nada de él en la ciudad de Rodas. Incluso no es seguro su ubicación exacta. Sin embargo, muchos lo ubican en el puerto de Rodas, con un pie a cada lado de la entrada y los barcos pasando por debajo de él.
Hoy en estos extremos hay dos columnas con estatuas de ciervos, animal símbolo de la ciudad. Y aunque falte el gran Coloso es un paseo que vale la pena. También en el puerto se puede visitar al Fuerte San Nicolás, construido más de 1700 años después (1467), pero está en pie y es muy bonito.


Visitar Rodas: sus Playas
Rodas no sólo tiene historia, también cuenta con playas increíbles.
En la misma ciudad de Rodas hay playas muy lindas (es que con ese color del mar, difícil no lo sea). Cerca de mi alojamiento estaba la Elli beach, pero no llegué a quedarme porque las dos veces que pasé había mucho viento.
Pero alrededor de toda la isla se pueden visitar una cantidad de playas y es fácil moverse en transporte público. Hay una “terminal” que es una esquina nomás, pero te dan toda la información con los horarios a cada destino. Y los tickets no son tan caros.
Yo tuve tiempo para visitar estas playas fuera de la ciudad:
- Playa Anthony Queen: Famosa por haber sido escenario de la película «Zorba el Griego», es preciosa pero muy concurrida. Llena de reposeras
- Playa Ladiko: Junto a Anthony Quinn, otra bahía hermosa, aunque también repleta de gente y difícil de encontrar un hueco en la arena si no quieres pagar por la reposera
- Playa Faliraki: Mucho más amplia que las anteriores, con suficiente espacio libre para quienes prefieren evitar las reposeras. Aunque también tiene la opción.
- Playa de Lindos: Peciosa, con espacio libre y servicios de reposeras y bares. Con la vista del castillo de Lindos en lo alto




Mágico pueblo de Lindos
Si tienes la suerte de pasar más de un día en Rodas, Lindos es una visita imprescindible
Para llegar se puede utilizar el autobús desde la misma terminal. En el pueblo, haya crucero o no, van a encontrar muchísima gente en las calles. Pero mucha. Es una ciudad pequeña y la segunda más turística de la isla. Es más parecido a lo que una espera de Grecia: casitas blancas, callecitas angostas, y además tiene su propio castillo y una playa espectacular! 😍



El castillo por dentro me decepcionó un poco, la entrada es cara y sólo se ven restos desordenados. Aunque quizá lo más interesante son las excelentes vistas ya que está en una parte elevada de la ciudad.


Si bien vale la pena por las vistas, el castillo luce más desde afuera que desde adentro, sobre todo visto desde la playa, y si es posible desde el agua, mejor aún. Agua transparente, temperatura perfecta, clima ideal, reposeras para el que guste, bar en la arena, espacio para tirar una toalla para el que prefiera… qué más que disfrutar?
Quizá la frutilla de la torta fue darme cuenta, mientras estaba en el agua, que era lunes... que en ese momento tendría que estar volviendo a mi escritorio luego de la hora del almuerzo en mi oficina. Pero seguí flotando en el mediterráneo mirando un castillo en las alturas. Hay que reconocer cuando tomamos buenas decisiones ¡y disfrutarlas! 😁

Si tienen la suerte de visitar Rodas por más de un día (cosa que recomiendo mucho), tienen que ir a este paraíso. Es de muy fácil acceso en autobús desde la ciudad de Rodas.
Mi puerta de entrada a Grecia ya me había maravillado, pero quedaba mucho por recorrer. Desde Rodas partí hacia Atenas para seguir mi ruta por Grecia.